EL ODIO Y EL DIFICIL MUNDO DE LA MARQUETERÍA

Francisco Menacho, ese político de 30 años de incuestionable honradez, me acusa a mí de aprovechar un cargo público. Curiosa pretensión del gran caid de Olvera, que en su caída intenta arrastrar a todo el que pueda.Los hechos son claros, el propio Menacho los reconoce. Ha comido en el taller, los motivos y con quién ha comido y por qué son los que debe justificar y aclarar. Pero eso sería transparencia, de ahí que cuando no hay argumentos para defenderse se busca manchar al contrario usando alguna que otra marrullería y por qué no, un puntapié en la espinilla si se puede.No me gustaría reabrir una polémica de un hecho que ha sido denunciado por IU Olvera y no por Fernando Fernández, aunque parece que para Menacho todo es lo mismo. Por lo que a mí me atañe, no soy aficionado a la marquetería sino que tengo como hobby la construcción de guitarras, aunque como verán no dispongo de mucho tiempo. Allá en mis tiempos no lejanos de Director de Adultos, y a partir de algunas demandas que me hicieron plantee la posibilidad de hacer un taller sobre construcción de guitarra eléctrica dentro de las actividades de extensión del CEPER Pueblos Blancos. Llegué a llevar mis herramientas, e incluso las maderas necesarias al centro, usando para ello el aula que se usa para este tipo de talleres en la que preparé algunas plantillas y moldes para los futuros adultos. Todo iba bien, pero finalmente me cogió la política y lo del taller tuvo que esperar. Ya de alcalde fui un día con el permiso del director del centro a recuperar e intentar acabar las plantillas para ver si otro podía dar el curso ( no sea que me acusaban de protagonismo si lo daba yo gratis). La cosa no avanzó y es cierto que las herramientas y las maderas estuvieron guardadas en un cuarto de la asociación de alumnos durante más de un año y siento todo el transtorno que hubiera causado ese almacenamiento. Ese es todo el uso que he hecho de mi cargo público: intentar hacer un taller gratuito poniendo yo mis herramientas y los materiales., hasta que me metí en política” como dice Don Francisco. Hoy en día, será gracias a la política, me ha ido a mejor, tengo un taller trastero propio, donde puedo dejar las herramientas aunque no tengo tiempo para dedicarme a esa pasión que es el mundo de la guitarrería.Paco, no te preocupes, cuando deje ese sillón al que tú dices que estoy pegado, seguro que me dedico- ya sí- a la marquetería. Y seguro que te hago un barco de esos, un avión o lo que tú me propongas. Y te lo llevaré, Paco, personalmente. Ya te imagino, aún en Diputación, con tu secretaria y tu despacho. A lo mejor quizá de presidente, si esos numerosos enemigos internos que tienes ( y que he de reconocer que no son tan trabajadores como tú) no te apuñalan antes. Y nos saludaremos como esos amigos que en el fondo- aunque no lo supiéramos - hemos sido siempre ( como en aquel mes de Enero en el parque Entrecaminos cuando me dijiste que sólo sacaría dos concejales y vosotros nueve, pero que no me sintiera mal). Descubriendo que en el fondo nos queremos, pondrás la mano en mi hombro sentenciando: eran cosas de la política. Y lo mejor de todo: seguro que me invitarás a comer